Orphan's lament

El lamento del huérfano te atraviesa. Se queda en lo hondo de tí y anida, porque no tiene raíces a las que aferrarse. Crece inundándote de su profunda tristeza.


Cuando el lamento del huérfano te lleva, eres una nube gris de tormenta que solo sabe llorar.

Ensayo nº7. Sobre el arte de la palabra.

Recoger palabras huérfanas, abandonadas, palabras a las que el tiempo ha borrado sus últimas letras, mutiladas. Palabras presas en ráfagas de aire gélido destinadas a morir sin ser jamás escritas.


Acogerlas en el interior de tu pecho hirviente de vida y contemplar su catarsis con la mirada tierna de un infante.

Luego sólo has de dejarlas fluir.

Tribute to his voice.

Me hablas de una tierra que no alcanzo a imaginar, por la inconmensurable belleza que la inunda. Me hablas de un pasado que me perteneció antes de vivir sobre esta piel. Me habla tu voz de lunas eternas sobre la arena del Rajastán. De danzas imposibles con los escorpiones. Estupas en el cielo.
Puedo ver mis propias manos arrojando cientos de pétalos sobre las aguas del Ganges, a orillas de Varanasi.


En el Sol, el dorado se funde con el rojo y su luz baña de eternidad cuanto toca. La mirada del iluminado atraviesa mis costillas y es capaz de ver cuanto acontece en mi corazón.

Los colores del otoño.

Y quedaron sin cuerpo. Lánguidos vahos azulados. Ocres suspiros. Observan a los viajeros con la boca doblada del revés y el rostro triste. Lloran hacia el cielo y cuando hace viento, vienen a empañar los cristales con su frágil añil alicaído. Son efímeros, como la palabra sin tinta.


Ahora crecen en las copas de los árboles que en otoño pierden su follaje. En breves remolinos de viento, meciendo la hojarasca seca.


A veces, cuando llueve, caen presos de su infinita tristeza y se suicidan en los charcos de la melancolía que noviembre trae consigo.

El ninja.

Provoca. Nervios sudor sangre palpitación. Hojas metalicas, acero líquido en la lluvia de esta batalla. Separa con sus filos, lentamente, la carne de mis huesos.

-Tiempo.

Escritura automática. VII

Bebo. En pequeños sorbos balbuceantes, deseo. Amante del verbo, confieso, haber matado a Morfeo para llenar de mis versos tu sueño.

Autorretrato.

Un hombre hecho de arcilla, modelado con las manos del tiempo, dotado de vida en un sopido tras las nubes.

Hecho único a través del arte.

Ensayo nº6. Sobre la pasión.

Es el impulso imparable de expresar amor a través del cuerpo.

De canalizar con el físico el estado más elevado del alma.

En el infinito por un momento.

Ya se que se siente cuando eres luz. Cuando el tiempo se deshace.
Cuando sientes que has alcanzado el infinito.

Los colores del mundo.

Quiero dártelos hoy.
Feliz cumpleaños Pez.

The colourkeeper.

Atesoro bajo mis costillas, cada minuto de inmensidad. Cada roce sublime con tu piel, erizando mi vello. Cada palabra de amor.

Last night dream.

Soy un soñador enamorado, un marinero que navega desnudo sobre las luces de colores que impregnan de vida esta noche. Me pierdo en tu vestido blanco y los limites de nuestra piel se desdibujan, creando una sola silueta.

Todo en esta mañana me huele a azahares y salitre, vuelvo a mi barco en el viaje al infinito y siento que soy inmortal.

Ventana a la incoherencia. Pasaje tercero.

Caen las horas del reloj. Agujas hacia el vacío, en el fregadero. Tazas de desayuno con el chocolate reseco. Gatos gordos pasean sobre charcos de agua sucia.


Calcula la composición de esta escena. Tanta abstracción tiende a infinito.

Gris y sepia.

Eldorado.

LLevo muchos años respirando esta mezcla de salitre, pólvora y humedad que se cuela por las rendijas de mis pulmones y me hace sentir poderoso. Sobre estos mares he vivido siempre al acecho de la aurora, al otro lado del horizonte. Mi sangre ha manchado muchas veces la vieja madera de cubierta.

Bajo la Luna de Marzo he destilado en pequeños frascos de cristal, los tintes de la lujuria mas intensa. Escondo en la bodega, bajo veinte llaves, cada memoria desde que me enrolé como marinero, hasta hoy mismo, en papel de algodón y escritas con sangre de piratas.


Diario de abordo.

Blood.

Furiosa, moviendose en tromba por mis venas. Respiro y me crujen las costillas, casi no hay espacio para el aire. Y esque es tanto lo que hay aqui dentro, que empiezo a pensar que me va a matar.

Relojes de hojalata.

Segundos, baratijas del tiempo, traficante de oro pesado en parpadeos, cuya balanza siempre cede a su favor.

Suspiros tintados de azul y la mirada perdida entre los railes que se pierden a lo lejos.

Los colores de medio mundo dia y noche rebotando en el interior de mis retinas y una nota escrita en el reverso de una servilleta, en una cafeteria donde los niños juegan y dos amigas toman un capuccino viendo pasar los segundos, baratijas del tiempo...

Camino de aprendizaje. IV

Renacer en un suspiro naranja, una declaracion de intenciones y un San Francisco.

Volver a ser peces que agitan con vigor sus aletas y se deleitan con el bailoteo sugerente del agua sobre sus escamas.

Sentir paz dentro de mí.

De sonrisas reveladas en andenes.

Te busco en una mirada, imagino una excusa. Chocan tus iris con los mios, bajas la vista hacia un mar de letras que poco te interesa. Demasiado guapa para estar tan seria.



Sonría por favor.

Gratitud.

Un recuerdo de la Patagonia, herramientas de artesano para cumplir un sueño pendiente, y una pecera para que este pez pueda perderse por el mundo.


Una tarjeta con tu perfume y las palabras mas bellas con las que nadie pueda soñar.
Dulce, dulce aniversario.

Gracias.

Números.

Dijo el tango que veinte años no son nada.

Le dije a la vida "gracias" por cruzarme con ella.

Por este año y pico, que vale por mil vidas.

Felices primaveras, viajero.

Tales of revenge.

Soy capitán de un navío invencible. He atravesado los mares sesgando vidas a mi paso, mutilando existencias en un solo soplido. Desde mi camarote, veo la Luna, en esta noche de verano, mientras las aguas dormitan tranquilas, a la vispera del amanecer de todos los fuegos.

El sol se alza rojo en el horizonte y truenan los cañones, reverberando en el alma de la majestuosa Ímpetu. Una centena de cañonazos despues, Bremen se hunde en las llamas.


Nadie insulta a mi mascarón de proa.

Nadie.

Sombras de Darjeeling

Caminar con los ojos cerrados, dejando que la fe y el amor soporten tus pies y guíen tus pasos. Abrir los ojos y encontrarte a ti mismo caminando sobre el aire en medio de la inmensidad.

Y sin embargo, no me he caido al abismo...cosa que no llego a entender.

¿Que fuerza invisible, o temerosa de mostrarse, hay bajo mis pies?

Rainbow Buddha.

Y la de agradables sorpresas que aun nos esperan de quienes nos rodean...

The one

De hecho, lo eres.

Camino de aprendizaje. III

De nuevo.

Tacto. II

A nuestras noches les faltan horas.

Ella

Cierro los ojos y siento un cosquilleo en la punta de los dedos. Como si estuvieran inquietos, como si sintieran que poco a poco la melodía se hará dueña de ellos y vagarán por el aire dibujando sobre mi imaginacion una silueta de mujer. Es un hormigueo distante, sin embargo siento su fragancia, rozando mis párpados, jugando risueña al rededor de mi cuello.

Un olor conocido, ansiado, anhelado en largas noches de Mayo mirando por mi ventana las horas pasar ,cogidas de la mano bajo la luz de las farolas, en la calle. Le saco un gajo a mi mandarina y sigo ensimismado, recordando el brillo de su pelo al salir por la puerta de mi casa.

Le guiño un ojo a la cordura y le pido que me deje sólo cinco minutos más, que el sabor de la mandarina es así mas intenso. Entonces de nuevo siento esa caricia por la espalda, giro mi mundo hacia adentro y recorro el mapa de mi piel, por dentro, intentando encontrar el punto justo de tu ultima caricia y cuando lo encuentro; solo tengo que pulsar mi propia piel, todo vuelve a fluir. Las manos de mi amada vuelven a recorrer mi pecho y su fragancia envuelve cada esquina de esta habitacion, su parpadeo marca la cadencia de mis latidos y un solo beso me concede la vida eterna.


Empiezo a creer, que como tu dices, pequeña mía, no moriré nunca

Daemon

Me he sentado a esperarte, Daemon. He observado las paredes de esta habitación, parpadeando al ritmo de la música, respirando ansia, intentando olerte.

Se que vives agazapado, escondido en alguna de las muchas esquinas que me guiñan el ojo pícaras.

Hoy han intentado analizar los colores de mi barco. Yo les he dicho "sólo es un barco, está hecho para navegar, no para que lo entendais", e inmediatamente después te he oído reír al otro lado de la imaginación.


Hacemos un buen equipo.

A secret place.

Un lugar secreto y una canción de enamorados. Bolas de hielo cayendo sin sentido desde el cielo y colándose a través de una ventana abierta en el pecho de quienes sueñan.

Un lugar amable no lejos de aqui, un espacio entre la realidad y los deseos.

Dia lluvioso.

Aguaceros de Mayo dentro, y fuera.

La veillée.

Temblorosa la mano, sobre la boca jadeante, su piel arrugada como una flor pasadas sus horas. Los cristales empañados de sudor de los cientos de cuerpos que mundo adentro, se retuercen entre alaridos de placer. El caótico despertar de la ciudad es tan solo el eco de la vorágine de sexualidad derramada durante la noche.


Pero afuera, los cuerpos corren bajo gabardinas, sombreros, paraguas, fulares y los charcos parecen estremecerse bajo los tacones de las damas.

Inspirar

Tejer con las arenas del tiempo una verdad para los años.

Escritura automática. Les Jours Tristes.

Murmura la hierba del patio al verte correr, sujetando tu muñeca de cristal, preguntandose a dónde irán tus pasos.

Miras fijamente al cielo y la casa donde nos criamos de pequeños parece tan vacía, hermana...

La lluvia empieza a caer del cielo como un llanto de los angeles que arriba en lo alto se lamentan de no haber podido llegar a tiempo. Te adentras en el bosque en una carrera a la desesperada , huyendo de la sombra que viene de lo lejos, de ese lugar sin nombre, debajo de la casa del arbol donde , de pequeños, jugabamos a trinchar insectos.

Viene nuestro pasado tras nosotros, viene a recordarnos que somos débiles, a decirnos que una sola gota de lluvia puede partirnos en dos, viene como una melodia sobrecogedora y mis dedos sangrantes se paran en un resquicio de la puerta intentando impedir que la cierres.

Estas llorando hermana y no sabes bien porqué, pero crees que si me dejas pasar te comeré como una sombra y será el fin.

No soy yo tu sombra, ni soy la luz que se refleja en tu muñeca de cristal.

Sólo soy un niño perdido.

Sur le fil.

Sonríele a la blanca primavera declarada y que aún no ha aterrizado con sus colores sobre las flores de los campos. Invitala a pasar, con un gesto coqueto entre una mirada y una sonrisa tímida. Tus rosados caramelos, brillantes tras el paso de tu lengua sobre ellos, me incitan. Respiro tu pulso acelerado y tus misterios ahora expuestos, manando de tus poros, tu fragancia perturbadora y el tacto imposible de tu piel a un suspiro de la mía.

El Sol vivo del amanecer nos observa, mientras el azul infinito de tu mirada se pierde como un torrente a través de mis retinas.

Blitzkrieg.

Teñirme las manos de hipocresía en un apretón, sonreirte con mi inmaculada barrera de hueso, reteniendo a mi lengua tras sus muros.
Gritar "que te jodan" a la misma mano trajeada que sigue hasta un cuello oprimido por sus propias mentiras.
No me vais a atrapar en vuestro mundo caníbal de asfalto y blanca mercromina en polvo.

Respirar

El tiempo pasa tic tac y estos dias grises se acabarán y volverá a sonreir la primavera en nuestros pechos.

Nocturno.

Piezas de un puzzle de mi memoria incompleto que no llego a entender. Camino deprisa por el muelle, los candiles de aceite siguen en la vigilia nocturna que les da vida y todo huele a sal. La madera cruje bajo mis pies, impertinentes, que se atreven a alterar el silencio de esta noche.

Mi embarcación descansa sobre la mar, tranquila, al amparo de la Luna.

Hay una melodía que se cuela por las rendijas de mis ropajes y me envuelve en una sensación familiar.

Tras las cortinas rojizas de la ventana puedo verte, dormida, con los labios entreabiertos, y cientos de dudas asaltan mi cabeza.

¿Porqué no te desperté?



-Besarte habría bastado para hacerme comprender.

Sueños en cubierta.

Cierra los ojos y siénteme. Imagina que estoy junto a ti. imagina que te abrazo y que el mundo se para, y estará ahi quieto sin moverse mientras estemos abrazados, y que nada importa mas que eso. Puedes besarme, puedes jugar con mi pelo, puedes hacer lo que quieras mientras estemos abrazados porque el tiempo nos espera y por una vez; es nuestro aliado.



Y las estrellas, tímidas, sonríen allí en lo alto.

En tus ojos.

Nace mi sonrisa.

Pez en la arena.

Horas contemplando las olas sinsentido de un mar que añora tu nombre.

Puede el mundo brindarme playas interminables, costas cristalinas y cientos de arrecifes donde cobijarme, que el mar y sus aguas me parecen insufriblemente vacías sin ti, pez, a mi lado.

Tic Tac.

Odio al tiempo, siempre corre en mi contra.

Gaudeamus.

Sólo se trata de arrojar luz sobre los campos de vida como si sembrásemos alimento.

Armonía. II.

Es curioso como uno es capaz de construirse mundos imaginarios solo con pensar qué ocurre más allá de las cortinas de su habitación. En ocasiones construimos mundos oscuros, dejandonos llevar por nuestro caótico mundo mental, lugares en los que todo es mentira. En ocasiones vislumbramos un mañana esplendoroso, lleno de alegría y vigor. Proyectar nuestro futuro mas allá de nuestras cortinas, desde nuestro corazón, nos hace poderosos.


Mi corazón grita amaneceres cargados de pasión y paseos por la playa al atardecer.





A Laura, origen de todos los poemas.

Quédate hoy.

Quédate hoy conmigo. Vive conmigo un día y una noche. Prometo mostrarte el origen de todos los poemas y enseñarte a contemplar el mundo sólo con tus ojos.

Walt Whitman.

Andrómeda.

Trenes que vienen y van, vagones abarrotados de cabezas tristes. Notas de metal que inevitablemente evocan callejones escondidos. Paseos en taxi bajo los ojos luminosos de la gran urbe. Los amantes, que en su pequeño rincón a color, abrazan sus cuerpos y lentamente, como pasando las últimas páginas de su novela favorita; se besan.

Rompen las nubes y el murmullo constante de las gotas muriendo sobre las farolas metálicas ahogan los gemidos de ella. Sus mejillas se encienden. Los labios entreabiertos de Andrómeda persiguen la comisura del tiempo, amante furtivo.

La edad de la inocencia se te escapa, pequeña Andrómeda.

Shir lamahalot.

Esgrime imágenes, apenas duerme, añora las lunas del cielo israelita bajo el que conoció el amor. Hoy se halla inmerso en una moraleja, en el llanto final del cuento que recoge sus días sobre la tierra. Comprende al fin las palabras mas importantes del Señor.

Anhela los campos hirvientes de vida, la dulce melodía del amanecer. Su vida de asceta se asemeja a lo efímero de un rayo de luz.

Los pozos de plata y las arboledas vívidas son el hogar de Dios. Y tambíen el mío.

The black pirate.

El pirata negro está solo en la oscuridad, vive sólo, en las sombras de tu mente, robando en las esquinas del tiempo, asaltando barcos fantasma en cada copa de whisky.

Un día el pirata negro reconoció sus propias manos entre la niebla de su existencia.

Saltó desde el desfiladero mas alto esperando hallar la muerte contra las afiladas rocas que desde abajo, desafiantes, exhibían sus puntas clamantes de sangre.

El mar siempre reclama lo que le pertenece.

Lover's sunday.

Respirar profundo cuando sale el sol y dejar que el viento te despeine con una nota de color en su latido. Dejar tu vista volar sobre los campos de avena y ver la luz floreciendo al otro lado del sendero.



I've felt in love again.

Om.

Se perfila, quizás, un camino entre el bullicio.

El día mas largo.

Me siento enjaulado. Perseguido. Interminable lucha sin cuartel contra mi yo escondido entre las sombras. No quiero estar aqui. No quiero pertenecer a ningun lugar. Deseo ser arrastrado por el viento. Todos somos nómadas. Unos desisten en la lucha. Otros no.

Horizontes eternos.

Estuvo largo tiempo contemplando la orilla. Pensó, que si toda aquella inmensidad le había sido concedida, también una eternidad le habría de ser entregada para poder adorarla.

Last passage from Berlín.

Nos despedimos un Octubre bañado por el ocre de atardeceres melancólicos. Jacqueline volvía a su Francia natal cargada de una maleta en la que llevaba todo su pesar. Envolvió con mimo las pocas palabras que pudieron brotar de mi pecho aquella mañana, cuando me pidió que la acompañase.

Paseamos por los senderos en los que muchas lunas atrás perseguimos un sueño a lomos de la pasión que nos unió. Recordamos cada folio agostado arrastrado por el viento. Volvimos a beber de la lluvia mientras poco a poco, nos calaba.

Llegamos al andén, y en silencio, nos abrazamos durante horas. Cuando quise suplicarle al tiempo un segundo más, Jaqueline se desvaneció tras las puertas del vagón.


He llorado muchas noches tu marcha, dulce Jacqueline.

Novia tuareg.

Dentro de la jaima el crepitar de la chimenea y el olor del té me envuelven en una atmósfera única. Sus miradas recorren los mares de mis iris, las dos negras respiran ajenas al bullicio reinante. Una de ellas me conoce muy bien, su sonrisa cómplice me dice que sabe. Otra mirada cae en mi. Como llama, me juzga; pero sus ojos revelan valor, esconden un dolor antiguo y si observas más allá de la sombra, podrás ver amor.

Los ojos del desierto saben más de mi de lo que nunca podria haber imaginado.

Caged animal.

Envuelto, en mi burbuja de ritmos vampíricos y añoranza de tierras nunca conocidas; tan solo puedo derramar una lagrima por los tiempos en los que nos ha tocado vivir.

Si hubiese crecido ajeno al sistema, arropado por la luna nueva en días de fuego y hielo...

Sin embargo , mis células están contaminadas con la peste de nuestros días, y aunque lograse liberarme de mi prisión ponzoñosa, acabaria añorando ese mismo veneno del que juré liberarme.

O tal vez no.

L'orient est rouge.

Me acerco con mi barcaza, desde el rio, a la fiesta que acontece en la orilla. El olor a cecina de ciervo con miel me turba y clavo las uñas en las palmas de mis manos. Oigo las risas, los farolillos de papel brillan a lo largo del muelle. Llego con el espíritu cantando en romaní. Me reciben Gato negro y Gato blanco.


Que corra el vino.