2.25.2013

Unintended.


Sólo la figura vaporosa de su deseo existía. Y aún así la soñaba como una musa nacida de la sorpresa, del fortuito encuentro entre una caricia y una perla de sal.

Sabía que era irreal, eco de una carcajada de Morfeo, salida del mes sin nombre entre Marzo y Abril, donde los cristales de hielo crepitan liberando a Primavera.

Y tan imposible como era, la dotaba de vida en cada suspiro que derramaba por ella.

Madame Infierno.


Un hielo cayendo sobre las caderas de Madame Infierno. Más fuego para este cortejo y un mar de saliva sobre sus senos. Cien miradas seductoras tuvieron la culpa, pero apenas unas palabras bastaron para hacerla estallar.

No podía ser de otra forma, la pasión encontró su horma bajo esa minifalda y sabe Dios que lo que os cuento es cierto, pues dieron un tremendo concierto de gemidos para celebrar este reencuentro.

Y los diablillos corretearon desnudos por su pecho, agitando sus sombreros y riéndose como locos.

Vértigo. Stand by

En la noche de cera brillante sobre la tierra y de carmín corrido sobre la almohada, una mirada palpitante se cuela entre las cortinas, y tan fugaz como atrevida cae sobre el pecho desnudo de María.

En su boca danzaba el desenfreno con la amargura, y en su corazón la nostalgia con imágenes de una juventud que la abandonaba. 
Y así, puta como era ella, se le daba un aire a la inocencia cuando el sentimiento de pena la llevaba y dejaba que los candiles se apagasen solos, al otro lado del cristal donde mis ojos, atrevidos, la espiaban.

2.10.2013

Gracious.

En mis manos estaba la respuesta. En los dedos que aún conservo, aquellos que recuerdan mejor que mi memoria.

Te adoro, tanto, tanto, tanto. Dijiste que nuestras serían las torres de los faros y el sol que brillaba sobre ellas.